¿Qué Copenhago aquí?... Ahora también panamaño

Aventuras y paranoias de un maño exiliado en la glacial Dinamarca y que ahora buscará fortuna a la orilla de los mares del sur

jueves, 28 de febrero de 2008

Varsovia I

Bueno... lo que hace el desconocimiento... ya hace un tiempo que Xesús un día convocó a Xavi al zulo (así es como llaman a nuestro despacho)... una oferta a Varsovia por cuatro perras... ni lo dudaron un instante, estaban entusiasmados. Por mi parte, deben ser las canas o el hecho de ser el mayor y el más reflexivo, no me impresionó demasiado pero al final acabé uniéndome al viaje. Sin lugar a dudas puedo decir que, en los 5 meses que llevo aquí, ha sido la mejor decisión que he tomado hasta ahora. Empezamos con la ya tradicional foto de aeropuerto.
Nuestros anfitriones nos recomendaron coger un taxi entre los 4 para llegar al centro, no nos podían estafar demasiado y así fue, el precio un poco más de lo que nos dijeron que debería costar pero sin dar un rodeo por la m-30 de Varsovia. Llegamos a la plaza donde nos esperaban, dejamos las cosas en casa de David, mi compañero del máster en el CECO y quien nos acogió, y directos a comer un Kebab muy rico, que se lo pregunten a Xesús, tenía una carita de cansado que no podía con ella pero del Kebab, ni migas quedaron.
La ciudad majeta, amplias avenidas, mucho "commieblock" y, el centro cultural presidiendo la ciudad con una clase inesperada... lo que más me ha gustado de la visita. Paseos por el casco histórico, etc. La verdad que la ciudad chula, los precios también, y la marcha, bueno, de eso saben más los que ahí viven, pero si tienes ganas se te pueden hacer las mil en un garito... Los que tengan ganas de desahogarse porque los precios, clima, etc. de su destino no se lo permite pueden encontrar aquí inesperadamente su oasis en medio del desierto.

En Copenhague muchos se quejan del viento (uno es de Zaragoza y está más curtido por el cierzo) pero Polonia no se queda atrás... por momentos las ráfagas alcanzaron más de 110 km/h. para acojonar un poco.
El domingo rutita por un parque, comida en un sitio tradicional y breve visita al museo del levantamiento, carretera y manta.
Las fotos... en otro post sólo para Varsovia
PD. Hasta los Oscars tienen su corazoncito... esto ocurrió el pasado lunes en la ceremonia.

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