Última semanita

Con la pena de haber vuelto de Zaragotham me entregué la última semana a los placeres de la carne, nunca mejor dicho.

El viernes por fin Ale conoció las generosas raciones del Klimt, sitio por el que desfilará todo aquél que se aventure a visitarme a estas recógintas tierras. Después toda la tarde en su casa, arreglando el mundo, tomando alguna cervecita y, tras la incorporación de Super Xesús y el compañero de piso de Ale, un danés tan alto como el Aneto más o menos, una vueltecita por la noche para culminar volviendo a casita en bici, sólo me falta tararear la canción de Verano Azul... todo se andará.

El sábado día semanal de la pereza, si no hubiese sido por María todavía estaría ahí en la cama marmoteando, algo que la gente de España sabe con certeza pero que no deja de causar perplejidad a muchos de los que están por aquí. Tras la llamada de María conseguí arrastrarme hasta la bici (porque eso sí, perezoso pero no dejo de moverme con la bici) para ir al cine a ver There will be blood, y, como las pelis largas cuestan más, ahí que fueron 95 Dkk (13 euros, el truco de Dinamarca es comprar lo que necesitas sin echar cuentas, si lo haces terminas comiendo bocatas de ketchup, que igual tienen su aquél en la innovadora y prolífica gastronomía danesa). La peli bien, lenta a veces pero con una música impresionante y, a pesar de todo el reconocimiento del mundo para Daniel Day Lewis, servidor se queda con el soberbio Paul Dano en su rol de predicador religioso.

El domingo viajecito a Malmoe, cuidad majeta con algun detallito, como el famoso edificio Turning Torso de Calatrava; además así crucé por primera vez el puente del Øresund!. Una pena que en algunas fotos se me colase un indigente que pasaba por ahi... en fin no todo en este mundo puede ser perfecto, pero se hizo lo que se pudo.

Por último ayer, gran lentejada gracias a las anfitrionas Elena y 3nid, el cocinero Rafa y los demás invitados, Super-Xesús, Xavi, Ale y el menda. Quien diría que las lentejas a las 22.30 de la noche sentaban tan bien! Como dice Super- Xesús, el superhéroe ESPAÑOL, de la oficina(ver foto al lado), juro que no volveré a pensar que las lentejas no se comen por la noche!

En fin os dejo una fotillo de Malmoe, (perdón por el indigente albano kosovar frente al Ayuntamiento) y el testimonio gráfico del antes y después de la lentejada noctura, más la foto de las anfitrionas.

Video: dos enemigos acérrimos a punto de zanjar sus difirencias con una pelea a muerte... (Gracias MadTV por los grandes momentos de risas que me haces pasar :-D)