Zaragoza hoy

Dentro de 8 horas, a las 21 se abrirán las puertas de la Expo 2008 de Zaragoza. Con ello se culminan 9 años de duro trabajo de una proposición lanzada en el Ayuntamiento hace tiempo. Muchos pensaron que se trataría de un brindis al sol, pero el viernes 17 de diciembre de 2004 se confirmó que la Exposición Internacional de 2008 se organizaría en España.
La candidatura maña se imponía claramente a Trieste (Italia) y Tesalónica (Grecia) en las votaciones y la alegría inundaba la ciudad.
Con la Expo llegó una ola de inversiones en infraestructuras que pusieron la ciudad patas arriba. Ya sólo con eso la ciudad ha ganado. La expo sirvió de catalizador para ejecutar obras que se deberían haber hecho hacía 15 años y que sin ella, habrían tardado otros tantos en ser planteadas.
Para muchas personas Zaragoza sigue siendo una ciudad de provincias, poco más grande que la suya y con gente noble pero con un acento bastante cómico.
Para otros es sólo un paso intermedio entre Madrid y Barcelona, un mal menor en medio del camino que puede aprovecharse para visitar a la Pilarica y poco más.
Pocos son los que "pierden" su tiempo tapeando por el Tubo, deambulando por el Casco histórico, el Palacio de la Aljafería, el Parque Grande, la Seo con su impresionante lateral mudéjar o las iglesias de San Pablo, la Magdalena, el patio de Santa Engracia, el Paseo Independencia, el Colegio Joaquín Costa o Gascón y Marín, Paseo Sagasta con sus fachadas modernistas... buf me quedo corto, sin espacio para el Palacio de Larrinaga, la Cartuja del Aula Dei, el Museo Provincial...
Esperemos que la Expo sirva para cambiar la imagen de los que vengan y, en cierta medida, la mentalidad apocada, temerosa y desconfiada de algunos de los que en ella viven.
Hoy la ciudad será el centro de atención de muchos flashes, por un momento quizá eclipse a las ciudades que aparecen todos los días en los medios; será efímero y hasta cierto punto ficticio; en tres meses nadie hablará de ello ; por eso y porque desde el exilio todo se ve más gratamente, espero y deseo que la Expo sea un éxito, que la gente que se anime a acercarse disfrute al máximo de la ciudad, ya que, de poder estar allí, yo lo haría... y como un loco.